En el reciente Tribunal Latinoamericano del Agua desarrollado en la República de El Salvador, en su octava Audiencia se ventilaron casos de afectación al recurso hídrico en Centroamérica, así como todas las violaciones a derechos humanos en las que han incurrido empresas transnacionales de la industrias de monocultivos como la palma africana, hule, banano y caña de azúcar, así como empresas mineras e hidroeléctricas.
El Tribunal por el Agua resolvió responsabilizar: al Estado de Guatemala por los actos de intimidación, amenaza y criminalización de la protesta social así como de toda represión contra las personas líderes, defensores y defensoras de los derechos humanos y en particular del derecho humano al agua.
Por la omisión de informar y consultar a las comunidades, por las afectaciones a las áreas naturales protegidas y su biodiversidad, por propiciar el desplazamiento de comunidades enteras, por las afectaciones al derecho de los pueblos indígenas y la falta a la debida diligencia por no aplicar los principios de precaución y prevención establecidos tanto en o la normativa nacional como internacional.
Durante la realización del Tribunal en Guatemala se realizo la marcha por el agua, y la madre tierra, en la que se denuncio todos los atropellos que este tipo de empresas han cometido en contra de las diferentes poblaciones así como de la Madre Naturaleza.